La calidad de vida como nuevo objetivo
Como humanidad, estamos viviendo unas circunstancias excepcionales que hacen que nos paremos a reflexionar… A reflexionar sobre la salud, sobre nuestra ajetreada vida, sobre las prioridades, sobre la familia… Es momento de hacer balance y probablemente una de las conclusiones a la que llegan más personas es darle mayor importancia a nuestra calidad de vida. Convirtiendo esto en un objetivo para el futuro.
Para conseguirlo, tenemos que regalarnos más tiempo para descansar, para encargarnos de nosotros mismos, para disfrutar en familia, en definitiva, para cuidarnos en general…
Y para poder cuidarnos tenemos que abandonar el celular y las todas las conexiones digitales y salir a pasear, hacer más deporte, llevar una dieta saludable y hacer actividades que nos llenen y sobre todo que ayuden a relajar nuestro cuerpo y nuestra mente.
Uno de los momentos más relajantes que existen es cuando tomamos sauna. Es un momento de relajación, de descanso del mundo exterior, de estar con uno mismo.
El sauna aporta muchísimos beneficios a nuestra salud, tanto física como mentalmente, ello ayuda a nuestro bienestar y, por consiguiente, a nuestra felicidad.
En el día a día estamos expuestos a una gran cantidad de estrés, el trabajo, los hijos, la casa, las actividades sociales, los eventos del fin de semana… Pero durante todo este proceso de días y semanas siempre nos olvidamos de alguien… ¡De nosotros mismos!
Es necesario tomarse un tiempo durante el día o la semana para desconectar de todo y descansar… Te proponemos que pares por un momento y te des una relajada ducha o sauna…
Numerosos estudios definen tomar sauna como una actividad relajante y muy saludable. Además, es beneficiosa para proteger el corazón, reduce los síntomas de la depresión, el estrés y la ansiedad y reduce las probabilidades de desarrollar Alzheimer.
Otras investigaciones han demostrado que tomar sauna regularmente aumenta los niveles de serotonina la “hormona de la felicidad”.